Con un enorme éxito de participación, terminó ayer la Gran Regata 2012 de Cádiz despidiendo a los 48 barcos participantes. El evento ha recibido a miles de turistas durante los cuatro días que han estado atracados los barcos en el muelle de Cádiz.
No han sido barcos cualesquiera los que se han dado cita en la bahía de Cádiz. Han sido los 48 veleros más grandes del mundo, y lo han hecho para conmemorar el bicentenario de la Constitución de Cádiz de 1812.
Cientos de personas fueron los asistentes de la suelta de amarras de los veleros, encabezados por el Juan Sebastián Elcano. El acto comenzó ayer sobre las 13 horas y el buque escuela de la Armada Española fue el primero en soltar amarras, con toda su tripulación formada en cubierta, ante los vítores de todos los asistentes.
El Amerigo Vespucci fue el siguiente en despedirse del puerto gaditano al que siguieron el resto de embarcaciones. Los barcos recorrieron el contorno de la ciudad para poner rumbo hacia La Coruña.
La Parada Naval se produjo a dos millas de la ciudad con las velas desplegadas y en diez bloques de cuatro veleros cada uno, y otros dos bloques de tres veleros, ordenados por tamaño de eslora. Entre cada bloque de barcos había una distancia de alrededor de 300 metros. El espectáculo se pudo divisar por todo el perímetro de la ciudad, desde la Alameda hasta la playa de la Cortadura.
El puerto y todos sus servicios permanecieron abiertos hasta las 17 horas.